Cómo estimular los sentidos en tu espacio de trabajo
Quítate de la cabeza la idea de que estar en la oficina es aburrido y que produce estrés. En cualquier caso eso puede ser causa de las tareas que tengas pendientes, pero el espacio de trabajo debe hacerte sentir bien. El diseño, los muebles y los materiales que se utilicen para poner en marcha la oficina son básicos para tu bienestar. Pueden estimular tus sentidos.
Cada vez pasamos más parte de nuestro tiempo en el trabajo. Ya sea una oficina, un coworking, hoteles, cafeterías o, ¿por qué no?, nuestro propio hogar. Todos estos entornos deben estar diseñados para promover tu bienestar tanto físico como mental. Es importante que se disfrute del espacio. Para ello, la luz, la intensidad de los colores de la naturaleza y el mobiliario invitan a conectar con el entorno a través de los cinco sentidos.
La iluminación y el color son fundamentales. Una tendencia es apostar por estilos mediterráneos. Se basan en el azul representando al mar, con amarillos para recordar al sol y a los cítricos, así como los tonos tierra –beige y ocre–, que combinados con el blanco funcionan muy bien para relajar la mente. El blanco siempre es una buena opción, ya que puede reflejar la luz natural, haciendo que destaquen el resto de colores.
«El espacio de trabajo debe hacerte sentir bien. El diseño, los muebles y los materiales que se utilicen para poner en marcha la oficina son básicos para tu bienestar»
En multitud de ocasiones hemos escrito sobre la biofilia, aquello que relaciona la naturaleza con el mobiliario. Este tipo de conexiones con la vegetación, el agua y, en definitiva, la vida aportan muchísimo a los espacios de trabajo. Además de reducir el estrés, mejoran la función cognitiva y el estado de ánimo gracias a elementos decorativos que incluyen artesanía hecha de barro, mimbre o vidrio, así como motivos vegetales como plantas y flores frescas, que aportan frescor y un sutil aroma natural al espacio que habitan.
Los materiales también son importantes para estimular los sentidos. Sobre todo el tacto. Hay materiales como el vidrio y la madera que además de proporcionar luminosidad nos hacen sentir cosas especiales al tacto. Otros materiales como los tejidos vinculados a la naturaleza también tienen la misma función. Hablamos de lino o de otros cien por cien PET.
El sentido del oído es quizá uno de los que necesitan mayor cuidado en el espacio de trabajo. Si bien hay conversaciones que son muy interesantes y de las que pueden surgir grandes ideas, otras veces necesitamos lo contrario, silencio para solucionar un problema. Los entornos de trabajo deben tener butacas con diseño envolvente y paneles acústicos fonoabsorbentes. Gracias a esto se puede recrear la quietud en los espacios abiertos, con independencia de las personas que los habitan.
En las largas jornadas laborales es importante cuidar la alimentación y la hidratación. Una buena idea es contar con un espacio de ocio en el que puedas hacer paradas para tomar zumos naturales, agua, infusiones y alimentos saludables. Así conseguirás una mejor concentración y un mayor bienestar
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